Se está realizando el sexto Congreso Continental de la Coordinadora latinoamericana de organizaciones del Campo que contó con la presencia de 1200 delegados de los países de latinoamérica
Hoy están marchando en el día mundial de la lucha campesina hacia la Sociedad Rural Argentina y la Embajada de Estados Unidos como símbolo de rechazo a las multinacionales que destruyen nuestros campos.
Conversamos con Deolinda Carrizo, una de las referentes de Argentina, quien en relación a los ejes que las organizaciones de Latinoamérica están trabajando, mencionó que uno de los desafíos es seguir articulando el campo y la ciudad, no sólo desde repensar los consumos sino desde promover la reforma agraria integral y popular. En nuestro continente, a pesar de que se tiene gobiernos progresistas, sigue habiendo una necesidad de que se llegue a un cambio del modelo que impera nuestros países, donde el acaparamiento y el extractivismo sigue empoderándose de nuestros bienes comunes y de los bienes comunes de nuestros pueblos.
En ese sentido, Deolinda señaló que trabajarán fuertemente en seguir profundizando la comunicación, no sólo desde la denuncia sino desde la democratización de los medios, teniendo presencia ellos también en los medios, en formar en materia de agroecología, derechos humanos y salud y fortalecer las alianzas con distintos frentes.
Respecto de la situación actual del campo, la referente indicó que se están viendo nuevos procesos de integración. Es un momento histórico en el que los valores de la solidaridad, el internacionalismo nos deben permitir avanzar hacia la soberanía regional
Además, la integrante del Movimiento campesino indígena sostuvo que «el problema del campesinado no es un problema del campesinado. Nunca lo ha sido. Es un problema de toda la sociedad. Por eso abocarnos a esa reforma agraria y popular nos permitirá una sociedad más justa y equitativa, donde estén incluídas todas y todos, desde nuestras diversas identidades»
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