En esta edición compartimos un testimonio del grave ataque que sufrió una comunidad campesina en Santiago del Estero por parte de una patota armada comandada por el dueño de la empresa Manaos. Desde Córdoba no podemos ser ajenos a la gravedad de este hecho que busca provocar y criminalizar a las familias campesinas.
Además, compartimos el testimonio de un productor agropecuario que, al ver los efectos de los agroquímicos en la producción de papas en su familia y en la tierra, dedicó su vida a recuperar suelos y producir en mediana escala de manera agroecológica.
El Movimiento Campesino de Santiago del Estero MOCASE denunció que una banda paramilitar atacó a la Comunidad de Iacu Chiri -Bajo Hondo: Destrucción y quema de ranchos, corrales, pozo de agua y alambres comunitarios con armas de grueso calibre. Sucedió el sábado 2 de julio cuando 6 camionetas con gente armada y encapuchada, comandadas por Orlando Canido (Dueño de Gaseosa Manaos) y sus matones ingresaron a la Comunidad del Bajo Hondo, donde se resiste desde hace más de 3 años a los intentos de desalojo por parte de este empresario.
Conversamos con Deolinda Carrizo, vocera del MOCASE-Vía Campesina, quien nos detalla la extrema gravedad de los hechos.
Raúl Fermanelli es productor agropecuario en el sur de Córdoba. Estuvo invitado en un festival para detener las fumigaciones de papa en la cuenca del Río Dolores, al norte del Valle de Punilla. Toda su vida trabajó la tierra utilizando productos químicos hasta que el peor de los desenlaces lo hizo cambiar por la agroecología.
Sobre este cambio y por qué decidió dedicar su vida a recuperar suelos y mostrar que hay otras formas mejores, sanas y armónicas de hacer agricultura. En esta edición del informativo de la agricultura familiar Córdoba, la palabra del productor.
