El sentido de la oportunidad: Entregarían por 15 años la tapera de Muiño
La frase fue mencionada por Víctor Beccaría cuando reclamaron por la concesión directa del balneario. Hoy el Ejecutivo acude al sentido de oportunidad de un oferente, sin buscar un camino de ofertas para elegir entre la mejor propuesta.
Díaz eleva al Concejo Deliberante un nuevo pedido de autorización para la explotación comercial de un espacio. En este caso, la tapera de Muiño.
Tal vez esta sea ¿la última? ¿una de las últimas? publicaciones sobre concesiones directas en Capilla del Monte. No. Probablemente no. Siempre hay alguna cosita más que se puede concesionar.
«No es el contenido, sino el modo», gusta decir a algunos. Y aplica en este caso.
La normativa provincial que rige en Capilla del Monte determina que «Toda enajenación, adquisición, otorgamiento de concesiones y demás contratos, se hará mediante un procedimiento público de selección que garantice la imparcialidad de la administración y la igualdad de los interesados». En resumen, que no sea por amiguismos.
Sin embargo, una vez más, el Ejecutivo eleva un pedido para que el Concejo Deliberante autorice el uso y explotación del lugar conocido como «la tapera de Muiño». En la justificación, y dada las condiciones del inmueble, explica por qué el formato sería de «contrato oneroso» y no se utiliza el concepto de Concesión Directa. A los fines prácticos, casi no hay diferencia.
La persona elegida para el otorgamiento, uso, goce, administración y explotación comercial es Cristian Ariel Maggio DNI 24228955
Son numerosas las situaciones en las que el Ejecutivo Municipal de Capilla del Monte eleva un pedido especial por fuera de la regla general prevista por ley solicitando autorización para concesión directa. Entre las que se fueron brindando de esa manera, podemos encontrar la del Balneario Municipal, Paseo El Zapato (que luego el beneficiado desistió), la compra directa de la centralización de oxígeno para el hospital, la compra directa de los juegos de la plaza, el local de perfumería y productos a granel en el Mercado, el local 7 del mercado municipal donde se abrirá un local de Addur, el local de calle Pueyrredón.
En la argumentación, el Municipio remarca que «la propuesta formulada resulta por demás atendible, toda vez que se orienta principalmente a la refacción, reacondicionamiento, puesta en valor y homenaje al gran artista Enrique Muiño. Ello, implica el cumplimiento de la Ordenanza 1165/97 pero, comulgando a la vez, con una propuesta gastronómica y turística que permitirá a los requirentes recuperar su inversión puesta en beneficio del patrimonio cultural capillense y, más aún, generar futuros puestos de trabajo y movimiento económico turístico colateral por la afluencia de personas»
Fueron tantas las concesiones directas (y las compras directas) que incluso uno de los espacios políticos, Capilla Cambia puso entre sus promesas del 2023 «obras por licitación pública y ninguna compra directa». A juzgar por las promesas, Zeug y García deberían votar en contra.
En el Concejo Deliberante de hoy 2 de mayo se conocerán los detalles de la propuesta. El resultado, probablemente esté cantado: Los cuatro legisladores oficialistas dirán que hay que confiar, Fumiato y García votarán en contra pidiendo que se llame a licitación. La gran duda es Zeug, integrante de Capilla cambia, pero cada vez más cercana al oficialismo.
La argumentación de la concesión directa del balneario municipal y de la placita «América Joven» se basó en «nos acercaron una propuesta». Lejos de activar para que esa propuesta sea una de las que entran en el esquema de posibles oferentes, el camino elegido por el municipio viene siendo «avancemos». «Hay que ver el sentido de la oportunidad», dijo Víctor Becaría cuando le reclamaron sobre la transparencia en la concesión directa del balneario. En ese entonces Cliserio Pisani se acercó al Concejo Deliberante, expresó tener una propuesta, y quedó hablando solo, sin mucho rebote por parte del oficialismo.
Sobre la tapera de Muiño
Vivienda que perteneció al actor Enrique Muiño, quien poseía varias propiedades en la zona. Está construida en las márgenes de lo que antes era el río Dolores en el trayecto entre el balneario Águila Blanca y el paso El Cajón.
Desde su galería al oeste se divisaba el río varios metros hacia abajo. Hoy, esa zona forma parte del embalse del Dique El Cajón, quedando la casa en su orilla. Por allí pasaba el antiguo camino a San Marcos Sierras, siendo reemplazado por otro al iniciarse el llenado del embalse.
