Se cumplen seis años de la muerte de Jorge Reyna en la comisaría de Capilla del Monte

A seis años de la muerte de Jorge Reyna, convocan a un encuentro para seguir exigiendo justicia. Será el viernes 26 de Octubre a las 16hs, en el Jardín de la Memoria de la Plaza San Martín.

En diálogo con Una Radio, Muchas Voces, Olga Tallapietra, madre de Jorge Reyna, expresó en 2018: «En la causa sigue todo igual, todavía no hay ningún imputado. (…) Recién este año han ido a presentarse los policías que estuvieron involucrados esa noche.»

El año pasado, familiares y amigos de Jorgito escribieron:

Hoy, una vez más, nos encontramos en las calles de Capilla del Monte, recordando como hace cinco años que el joven Jorge Daniel Reyna fue asesinado en la Comisaría de nuestra localidad, un 26 de octubre del año 2013.

Y, como cada año, se nos hace imprescindible recordar lo sucedido, en un contexto social y político que año a año incrementa la represión y el hostigamiento hacia los y las jóvenes por parte de las fuerzas de seguridad del Estado.

Jorgito, era oriundo de San Esteban, un pequeño pueblo de no más de 1000 habitantes, ubicado al norte de la provincia de Córdoba. El sábado 26 de Octubre de 2013 fue detenido en la comisaría de la localidad aledaña, Capilla del Monte, a cargo en ese momento del Comisario Juan Castro, por un presunto robo, donde tras ser golpeado salvajemente por la policía, fallece.

La noche del 26 de octubre cuando su mamá, Olga, se acercó a la comisaría no le permitieron ver a su hijo, decían que podía entorpecer el caso. Esa misma noche lo llevaron a Córdoba para realizarle la autopsia, que luego la fiscal les confirmó, “muerte por asfixia mecánica”. Según recuerda Olga, los golpes los tenía todos del lado izquierdo: cejas, piernas, costillas. Se lo entregaron casi desnudo y ante la evidencia de los golpes, la fiscal de aquel momento, Alejandra Hillman, aludió que los mismos fueron producto del traslado de la ambulancia por el camino sinuoso. Algo imposible de suceder, que no sólo nos remite a comprender la complicidad judicial en este caso, sino también la falta de respeto hacia los familiares que acababan de perder la vida de un hijo, hermano, sobrino y nieto.

Estas prácticas de violencia institucional se han extendido en todo nuestro país. Los aparentes suicidios son prensa de manera corriente, siendo un procedimiento más del modus operandi policial. Pero, en esta triste lista de jóvenes asesinados en manos de la policía, la lucha colectiva también se fortalece. Así, muchas madres comenzaron a juntarse para visibilizar los casos, potenciar la organización y el reclamo de justicia. Hoy, Jorgito está junto al reclamo de muchas madres y padres que se juntan en la Coordinadora de Familiares contra el Gatillo Fácil de Córdoba. Desde este espacio, con la fuerza histórica que batallan las madres, la muerte de sus hijos e hijas se hace un camino inexorable de lucha contra la impunidad, por la verdad y el derecho a la vida de todas y todos los jóvenes.

El accionar violento en los operativos policiales, los allanamientos, las detenciones arbitrarias, la tortura, las muertes en situación de encierro, tienen a los y las jóvenes de los barrios populares como su blanco predilecto, bajo la aplicación de diferentes artículos del inconstitucional Código de Convivencia. La impunidad de ayer continúa hoy cuando en democracia las estadísticas dan cuenta que hay un muerto cada 23 horas en manos de las distintas fuerzas de seguridad del Estado. No es un policía, es la institución, la justicia y un Estado que los protege.

Ya a 5 años, no podemos dejar de expresar los principales nombres de la impunidad en esta causa: la responsabilidad política del renunciado intendente Gustavo Sez, la desidia judicial quien tuvo en su momento a la fiscal Alejandra Hillman, cómplices y funcionales a las políticas represivas de la provincia de Córdoba. El entonces comisario Juan Castro, hoy premiado como jefe departamental, junto a los efectivos policiales de turno. Un entramado, que es parte de una política sistemática, ya que siguen siendo muchos los jóvenes del país que suman la lamentable lista de casos similares a los de Jorge Reyna.

5 años sin respuestas. Los elementos del peritaje oficial que figuran en la causa son más que suficiente acreditación de prueba para imputar a los guardias que ese día detuvieron y custodiaron a Jorgito por vejaciones y torturas. También comprendemos que la hipótesis del suicidio, desvincula la responsabilidad de la policía y los funcionarios competentes por tener detenido a un menor de edad dentro de una comisaría. Pero, siguen pasando los años y nuestra preocupación parte ante un poder judicial que parece velar por los intereses de los victimarios. La responsabilidad del Estado por la muerte de un menor en una comisaría se suma a una situación sistemática de represión y asesinato hacia los y las jóvenes de barrios populares que se siguen cometiendo en mano de las fuerzas represivas del Estado por mandato de gobernantes que responden al poder económico que pretende mantenernos en la pobreza, sumisos, sumisas y sin esperanza de nada.

Porque no queremos que esta causa sea otro ejemplo de la impunidad judicial y que pase a ser una más entre los tantos expedientes archivados y perdidos en la burocracia de la justicia. Porque no queremos que la vida de las y los pibes de nuestros barrios siga siendo criminalizada, perseguida, asesinada. Porque no queremos que el miedo sea la forma de relacionarnos y que el maltrato policial sea naturalizado. Seguiremos adelante con la firmeza en la lucha por la verdad, en las calles, juntos/as, organizados y organizadas, porque tenemos derecho a una vida libre de violencia.

La continuidad de una legalidad represiva, de una violencia institucionalizada , nos hace exigir justicia ante la impunidad de tantos casos de muertes y desapariciones, como el de FACUNDO FERREIRA, RODRIGO SÁNCHEZ, SERGIO CUELLO, DANIEL SOLANO, BRYAN PALOMEQUE, EL GUERE, MARITO SALTO, SANTIAGO MALDONADO, LUCIANO ARRUGA, FACUNDO RIVERA ALEGRE, YAMILA CUELLO, MARITA VERÓN, SILVIA GLORIA GALLARDO, MARISOL REARTE, LUZ MORENA OLIVA, DELIA GERÓNIMO POLIJOS, JULIO LÓPEZ, Y TANTOS Y TANTAS QUE SEGUIMOS BUSCANDO.

PERO LA IMPUNIDAD DE LA JUSTICIA, NO SILENCIARÁ NUESTRAS VOCES!!! Hoy salimos nuevamente a las calles por la memoria de Jorgito. Porque el Estado es Responsable. Este 26 de octubre nos convocamos en el Jardín de la Memoria de la Plaza San Martín de Capilla del Monte, para seguir exigiendo justicia, para hacerlo presente en la memoria colectiva de un pueblo que no olvide!!!

· Juicio y Castigo a los responsables materiales y políticos del asesinato de Jorge Reyna

· Basta de criminalización y persecución policial a las y los jóvenes

· Derogación ya del Código de convivencia

· Basta de gatillo fácil

· Basta de corrupción judicial, política y policial.”