Juicio por Yamila Cuello: se conocieron los alegatos de la Fiscalía

Como parte de los alegatos de la Fiscalía, el fiscal general Carlos Gonella y el auxiliar Gustavo Yofre, solicitaron la pena máxima para Néstor Simone por homicidio agravado por el contexto de violencia de género. Además, citaron los derechos establecidos en la Convención Internacional del Niño y la «extensión del daño» por la ausencia del cuerpo de la víctima. La sentencia se conocerá el jueves 3 de abril.

por Coordinadora Justicia para Yamila Cuello

‘Decime dónde está el cuerpo de Yamila, porque sé que vos la mataste’, le dijo una vez Soledad Cuello, hermana de la víctima al acusado. Simone, desafiante, le respondió: ‘probalo’, dijo Carlos Gonella al comienzo de su exposición. 

El fiscal valoró frente a los jueces la lucha de Soledad quien “a lo largo de estos años se dedicó a juntar elementos de prueba, declaró en esta audiencia y se hizo cargo del desafío, para concluir que el imputado Simone mató a Yamila e hizo desaparecer su cuerpo”. 

Gonella indicó frente al tribunal que el Estado continúa buscando el cuerpo de Yamila: “porque es una deuda que tiene el sistema judicial con la familia”, de la víctima.   

En coincidencia con la querella, encabezada por la abogada Graciela Taranto, la fiscalía solicitó absolver a Horacio Palacios por falta de prueba.  El hermano de Néstor Simone estaba imputado por el delito de trata de personas con fines de explotación sexual y por homicidio.  “Estoy íntimamente convencido de que él sabe qué le pasó a Yamila y dónde está el cuerpo. Pero no se pudo comprobar, así que voy a retirar mi acusación”, expresó el fiscal y agregó que “no queda otra alternativa que la absolución”. 

Gonella destacó que el asesinato de la joven cordobesa “no es un homicidio más, es un homicidio en un contexto de violencia, un círculo de la violencia que terminó con la muerte”. 

Al mismo tiempo, recordó que existen tratados internacionales que “le exigen al Estado en todos sus niveles incorporar la perspectiva de género y en especial el Poder Judicial”, así como una mirada interseccional. También, argumentó que Yamila al momento de empezar la relación era menor de edad- tenía 17 años- “por eso la Convención Internacional del Niño nos obliga a pensar en el interés superior de esa niña y sus derechos”.

En la sala de Tribunales Federales Orales 2 de la ciudad de Córdoba, Gonella reconoció que  “si se hubiese incorporado esta perspectiva en 2009, se hubiese dado una respuesta a la familia a tiempo, y quizás se hubiese encontrado el cuerpo de Yamila”. Para el fiscal hay una responsabilidad histórica y una deuda por parte del Estado y la justicia.

Los motivos del crimen 

El fiscal general manifestó que a lo largo del juicio quedó demostrada la violencia de género, la vulnerabilidad que sufría la víctima y la relación asimétrica que tenía con Simone.  “Yamila era una persona alegre, extrovertida y rebelde y que en un momento quiso salir de esa relación, y ahí despertó la violencia”.

“Este no es un homicidio más (…) es un homicidio en un particular contexto de violencia de género. Yo me imaginaba una espiral de violencia en cuyo punto interior está Yamila (…) En los estudios de género se habla del círculo de violencia, que abarca tres dimensiones: la de la propia víctima, la del entorno y la del agresor y a su vez se divide en fases que se repiten al infinito, hasta que ocurre un hecho como este, la muerte”. El fiscal detalla en su análisis cómo cada fase se refleja en el vínculo entre el acusado y Yamila citando tratados internacionales y la ley nacional de violencia contra la mujer, vigente desde marzo de 2009.

Gonella reconstruye su último año: “Cuando en diciembre de 2008 sus amigos y su hermana fueron a rescatar a Yamila- él la había encerrado y no le permitía comunicarse-, el acusado notó que algo estaba cambiando. Ella empezó a ver la violencia y la toxicidad de la relación”. En 2009 vuelve el acusado a vincularse con Yamila, “y como ella ya no le permite usar su cuerpo para pagar sus deudas, él la hace partícipe de otros delitos”. Según el fiscal, esa situación terminó de “enloquecer” a Simone, quién el 25 de octubre del año 2009, “la buscó y la mató”.  

Análisis técnico de las pruebas y calificación legal 

El fiscal auxiliar Gustavo Yofre, retomó las pruebas que expuso durante su declaración el oficial Sergio Daniel Oroda y desarrolló los puntos de la investigación que la Fiscalía consideró clave: 

En primer lugar rememoró que desde octubre de 2009 Simone logró restablecer el contacto con la víctima y empezó a mantener una comunicación “fluida y constante con Yamila”. La prueba de las pericias telefónicas “contradice la declaración del acusado durante la instrucción en 2012, que dijo que no frecuentaba a Yamila desde dos meses antes de su desaparición”. 

En segundo lugar, Yofre mostró que el “análisis de la telefonía prueba que el ex novio de la víctima -Simone- estuvo con ella inmediatamente antes de su desaparición”, según la ubicación registrada a través de las antenas. 

En tercer lugar, el fiscal auxiliar argumentó que desde el momento de su desaparición, “Simone ya sabía que Yamila no estaba con vida porque no intentó volver a comunicarse”. Anteriormente a su asesinato el registro telefónico muestra que el acusado la llamaba todos los días y después del 25 de octubre de 2009 la insistencia se ve interrumpida. 

En cuarto lugar, “el acusado intentó borrar todo tipo de pruebas”. Cambió de línea, vendió el auto y la casa. 

“Señores jueces, el registro muestra que Simone pasó a buscar a Yamila en inmediaciones de su domicilio y que no se supo nada más de ella”, expresó. 

Sobre la calificación legal, al no sostener el MPF la acusación contra Palacio, se cae el agravante por el cual había sido imputado Simone: homicidio agravado por el concurso de dos o más personas. Por lo tanto, detalló que la figura que corresponde aplicar en este caso es la conducta de homicidio simple, previsto por el artículo 79 del Código Penal, en carácter de actor.

Yofre solicitó que el homicidio se encuadre dentro del contexto de violencia de género. Y explicó que no se le puede aplicar la figura de femicidio porque la entrada en vigencia es a partir del año 2012, es decir posterior a los hechos.

Ausencia del cuerpo de Yamila

El fiscal auxiliar Gustavo Yofre manifestó que el homicidio puede ser acreditado por otros elementos de pruebas más allá del cuerpo de la víctima. «De lo contrario llegaríamos al absurdo y estaríamos premiando a un homicida porque su empresa criminal tuvo más éxito por haber logrado ocultar el cuerpo».

Yofre detalló jurisprudencia existente, como el caso de Marisol Rearte y su hija Luz Oliva, en el cual el tribunal de Villa Dolores sentenció a Juan José Murúa a prisión perpetua por femicidio y por el homicidio de la niña de dos años, sin encontrar sus restos. 

 “No son sólo números”, dijo en referencia a los femicidios. “En el 8M Amnistía internacional hizo un informe sobre los femicidios en Argentina, solo en el 2025, hay 1 femicidio cada 27 horas y el 73% de esos casos de femicidios son cometidos por personas cercanas a las víctimas”. 

“No son números, son nombres, son historias, es Yamila Cuello con un proyecto de vida, que quedó trunco”, dijo el fiscal y agregó que el asesinato es “la punta del icerbeg” más visibible de “un conjunto de situaciones violencias que padeció Yamila hasta el último día de su vida”.

“Tras 16 años de reclamo estamos convencidos de que estamos en deuda. Hoy este MPF pretende que se haga justicia, por Yamila, por su familia y por el colectivo de mujeres que acompañó, luchó y esperó todos estos años”, manifestó Yofre. “Brindemos una respuesta ante el horror que sufren las mujeres”.

Gonella finalizó con el pedido de pena, coincidiendo con las querellas consideró que no hay circunstancias atenuantes y que hay agravantes. “Una de ellas es el contexto de violencia de género en todas sus formas, física, económica, sexual y psicológica”.

También nombró la extensión del daño. “La república Argentina padeció y padece la desaparición de personas porque fue una práctica sistemática de destrucción de personas hace cincuenta años”. La desaparición, explicó, “prolonga la agonía e impide a la familia hacer un duelo”. Finalmente introdujo la noción de “daño a la persona” que abarca el daño a la vida, a los proyectos de vida de la víctima y de su familia. 

En función de estos agravantes solicitó el máximo de la pena, 25 años de prisión.

“Voy a apelar a las dos personas que están aquí, que permitan a la familia de Yamila hacer su duelo”, finalizó Gonella hablándole directamente a los acusados.

El martes 1° de abril tendrá lugar la última audiencia del juicio, en la que darán su alegato las defensas de los acusados. El 3 se dará a conocer el veredicto. Desde la familia de Yamila convocan a estar presentes ese día en la sede de Tribunales: «Hacemos un llamado a colectivos, organizaciones, medios y personas que han acompañado a la familia de Yamila todos estos años de búsqueda incansable, a acompañar en este momento clave. La cita es el día 3 de abril a las 9hs. en Tribunal Oral Federal N2 (Hipólito Yrigoyen 690)».

El alegato completo puede verse en: