Conversamos con Jesús Tapia, del merendero Adonai quien se desempeña laboralmente en el complejo «El Zapato» quien expresó: «Cuando nosotros abrimos el merendero al intendente mucho no le gustó. Hace tres meses le mandamos una notificación para tenerlo más legalizado y nunca me lo firmó. Yo cuando iba a llevarle la plata de lo que cobraba en El Zapato siempre me decía ‘ya te lo voy a firmar. Lo tengo en la carpeta’. Nosotros hemos tenido una muy buena relación con él pero desde que pusimos el merendero nos dio la espalda.»
Sostuvo que días atrás se encontró con Sez en el patio de la municipalidad y lo miraba serio: «El lunes estaba arreglando las cuentas para rendir y me llevó a la oficina de él y me dijo: ‘Vos trabajás hasta el 31. Tenés que trabajar hasta fines de septiembre pero vas a trabajar hasta fin de mes. Porque hace tres meses que están pasando cosas fuera del trabajo’ » .
Además, Jesús aseguró que la razón es que él puso el merendero y le duele saber que hay pobreza. Expresó también que el intendente le dijo que era muy buen empleado pero que hace tres meses que le vengo poniendo gente en contra y le trae dolores de cabeza. Además, que le dijo que no quería hablar más del tema porque iban a salir peleados. Me dio la mano y se fue.
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