En un comunicado emitido en la jornada de hoy, Fesprosa señaló que Verónica Reyes fue intimada a raíz de sus declaraciones en las que la situación era crítica y que no había camas ni personal suficiente para atender a los pacientes.
«En el día de ayer, la compañera Verónica Reyes, bioquímica del Hospital Domingo Funes y miembro de la Comisión Directiva de la UTS, gremio base de la Fesprosa en Córdoba, recibió una intimación amenazante por parte del gobierno de Schiaretti a raíz de sus declaraciones públicas sobre el desborde asistencial al que se ve sometido su Hospital, al igual que buena parte del sistema sanitario cordobés»
En diálogo con Nada del Otro Mundo, Ariel Gómez, secretario adjunto de CTA Córdoba, miembro de la conducción de UTS señaló que «la delegada que viene denunciando la situación del hospital me llamó porque le había llegado una notificación del Gobierno para que se rectifique o sería sancionada. La mayoría no puede decir nada. Quería hacerlo público».
El comunicado señala que «estas amenazas son parte del menú represivo del gobierno de Schiaretti, que en el mismo establecimiento ha trasladado y cesanteado trabajadores y trabajadoras de la UTS con fueros sindicales por efectuar similares denuncias sobre condiciones de trabajo, como es el caso de Ariel Gómez, secretario adjunto de CTA Córdoba, miembro de la conducción de UTS y de Fesprosa a nivel nacional. La lista de dirigentes perseguidxs y sancionadxs es larga: Marcelo Lamon, Carlos Altamirano, Estela Giménez, Valentina Noroña, entre otrxs.», explica el comunicado de Fesprosa, al mismo momento convoca todas sus regionales, a la Multisectorial de la Salud de Córdoba, a las centrales sindicales, movimientos sociales y partidos políticos a solidarizarse con Verónica Reyes
«Schiaretti busca acallar las voces disidentes para favorecer a los gremios amigos del poder»
