Política

Choque en Altas Cumbres: sin apelación, Oscar González va a juicio por homicidio culposo

La defensa de las víctimas reclama que se contemple la figura de «dolo eventual», que prevé penas más graves en caso que el ex legislador sea encontrado culpable. González protagonizó un choque en octubre de 2022 donde perdió la vida una mujer de 56 años y dos adolescentes resultaron gravemente heridas.

Por La Nueva Mañana


La defensa del ex legislador Oscar González que hace un año y medio protagonizó un choque en el Camino de Altas Cumbres -donde murió una mujer y dos adolescentes resultaron gravemente heridas- decidió no apelar la resolución de la fiscalía de Cura Brochero y la causa irá a juicio.

El histórico dirigente peronista de Traslasierra está imputado de homicidio culposo agravado y lesiones culposas agravadas por el siniestro vial ocurrido el 29 de octubre de 2022 a la altura del paraje Niña Paula.

La fiscal de Cura Brochero, Analía Gallaratto, pidió la elevación a juicio el pasado 4 de abril y la defensa de González decidió no oponerse, por lo que el ex funcionario deberá responder ante la Cámara del Crimen de Villa Dolores.

Por su parte, los abogados que representan a las víctimas insisten con el reclamo para que González sea juzgado bajo la figura de dolo simple.

El abogado defensor Miguel Ortiz Pellegrini sostuvo en declaraciones a ElDoce.tv que “la discusión es sobre la culpa” y no “por un hecho doloso” como planteó la querella.

“Creemos que tenemos las pruebas suficientes que determinarán que no hay culpa”, expresó sobre la participación de González en el hecho. A la vez, aseguró que “no tiene inconvenientes” para ser juzgado cuando la Cámara lo disponga. No se descarta que el proceso se lleve a cabo antes de fin de año.

Oscar González conducía una BMW X1 cuando impactó contra el Renault Sandero que manejaba Alejandra Bengoa, una docente de 56 años quien murió por el fuerte choque. En el automóvil también viajaban su hija, Marina, y una amiga de ésta, Alexa, quienes sufrieron gravísimas heridas.

Fuente: La Nueva Mañana

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