Desde el primer día del año, la empresa estatal que presta el servicio de luz en parte de la provincia impone una nueva suba.
Después de que el pasado jueves el Ente Regulador de Servicios Públicos (Ersep) provincial lo autorizara, finalmente el consumo de luz es más caro en buena parte del territorio.
El contexto es una tarifa, la de la Empresa Provincial de Energía de Córdoba (EPEC) particularmente, que subió durante diez de los doce meses del año 2018 (de julio a diciembre, de manera consecutiva), por lo que pasó a costar casi un setenta por ciento más caro.
El arranque del año nuevo viene con un ajuste fuerte: es del 12,4 por ciento para usuarios residenciales, aunque un nuevo por ciento de promedio contando a cooperativas, comercios e industrias.
En este caso puntual, la suba de EPEC no pasa por audiencia pública (trámite no vinculante) debido a que, en una de estas, se convino que los “ajustes de costos trimestrales» no debían reunir tal condición.
El aumento es similar al que se producirá en febrero por la suba de la energía propiamente dicha, en el marco del plan de quita de subsidios que implementa el gobierno nacional.
